Durante siete largos años de trabajo dia y noche me ayudaste a conseguir metas, a terminar trabajos, a programar; me acompañaste a ver películas y series. Reímos, lloramos, te maldije y te la cobraste con alguna falla o error en el sistema. Fuiste un gran servidor de paginas dinamicas y de pruebas para la instalacion y desarrollo de diferentes proyectos. Si bien es cierto que ya andabas con achaques, no habías presentado los síntomas de hoy. Definitivamente no la tan temida y odiada pantalla azul.
Que le vamos a hacer, te fuiste al cielo de las computadoras a causa de un error en el funcionamiento de tu disco duro. Te voy extrañar, fuiste una excelente computadora. Siento que dejaras un gran vacío en mi escritorio (literal, por que la verdad estas medio gordis…) que ninguna otra maquina podrá llenar.
Como toda buena pc, eras donadora de partes y espero que algunas de ellas se puedan reciclar. Ahora solo queda la gran pregunta de que es lo que haremos a continuación. ¿Conseguiremos un reemplazo para que desempeñe tus funciones y saque tu chamba? o, ¿dejamos tu lugar vacío y el resto del equipo de trabajo intentamos llenar el vacío que nos deja tu partida? No lo sé, habrá que consultar con Don Bolsillo.
Solo quiero decirte que fuiste una gran computadora de escritorio, y que en tu serie y modelo no hubo una mejor que tu. También quiero decirte que allá a donde vas no te sirven ni mis bookmarks ni los archivos escaneados que te llevaste. Así que, ¡haz el favor de reaccionar por 20 minutos para que pueda rescatar lo ultimo de información!